Me ha llamado la atención este artículo: Porno a la carta: combatiendo la piratería con personalización.
La industria audiovisual del porno siempre ha estado a la vanguardia de lo que sucedería después en el resto del mercado, entre otras cosas porque es una parte muy rentable de la industria audiovisual, y si ellos no adoptan una determinada tecnología es difícil que se termine generalizándose entre el resto de consumidores.
Por eso me interesa tanto esta iniciativa en la que el espectador podrá decidir qué es lo que quiere que ver, lo lo que quiere que ocurra y pagar por ese contenido.
Me pregunto como se trasladaría eso a la industria general, sobre todo de la ficción, que sería la que mejor podría adoptar algo parecido. Yo imagino un mundo en el que las productoras y cadenas seguirán realizando sus series, pero podrían ofrecer una versión premium para aquel que pagara por un contenido específico.
OJO: Spoilers históricos a partir de este punto
Imaginaos por ejemplo que los fans de Perdidos piden un capítulo final en el que los muertos resucitan y se encuentran con los de The Walking Dead. O un final de Los Serrano en el que estalla una bomba de butano en el bar y los mata a todos (yo pagaría por éste ;), o una versión de Friends en la que Mónica y Chandler se divorcian y éste se termina liando con Rachel. Las posibilidades son infinitas, eso sí, siempre que las peticiones sean razonables y baratas de producir.
Llevamos mucho tiempo experimentando con series cuyos giros puede decidir el espectador, pero esto sería algo totalmente distinto, ya que sería un producto personalizado. ¿Es factible? ¿Tiene mercado?
[Tweet ” ¿Pagaríais vosotros por poder elegir algo de la trama en vuestra serie favorita?”]
Porque claro, por otro lado está el hecho de que qué gracia tiene que ya sepas lo que va a ocurrir. Por tanto ¿es importante lo que va a ocurrir, o cómo lo van a contar los creadores?
Son muchas las posibilidades y desde luego merece la pena seguir los resultados del experimento en la industria del porno, y ver cómo se podría adaptar a los productos generalistas.