Ya lo comentaba mi colega de bitácora David Bravo el pasado 3 de febrero: La noticia del año ha sido la teta de Janet Jakson.
Y lo que al principio no dejaba de ser una anécdota curiosa que yo misma comenté el pasado 6 de febrero, empieza a oler a cortina de humo.
Han sido muchas las noticias curiosas (incluso absurdas) que se han sucedido estos días relacionadas con este tema como ésta, o esta otra donde mencionan el hecho de que la Serie Urgencias ha tenido que suprimir una escena en que una anciana mostraba su pecho mientras era atendida por médicos. Parafraseando a nuestro insigne Federico Trillo: “Manda huevos”. Porque lo que a mí me parece realmente inmoral, es que se intente comparar el númerito de J. Jackson, ideado claramente para provocar, con la atención médica a una mujer en una serie de ficción.
Pero vamos, que si quieren ejercer censura aquí os adjunto una muestra de lo que por defensa de la salud mental no debería permitirse su difusión 😉 También es una recomendación para los profesores de facultades de comunicación audiovisual, que les servirá como ejemplo ilustrativo de lo que no se debe permitir en una edición.
Ayer además se ha comentado en medios radiofónicos, que la cadena MTV ha decidido no emitir determinados vídeoclips en horario susceptible de ser visto por menores. O sea, que por ejemplo, el último videoclip de Britney Spears sólo podrá verse en horario de 22 a 6 horas. No se imaginan el disgusto que esto me ha causado. Pero lo superaré.
Pero naderías aparte: lo que realmente es preocupante es el hecho de que quienes controlan la “agenda setting” de los principales medios de comunicación, o sea, los que deciden entre todo el maremagnum de noticias diarias, lo que se publica o emite y lo que no, parecen estar más preocupados por la teta de J. Jackson que por los detenidos en Guantánamo, por poner un ejemplo.
Además, parece ser más importante el horario de emisión de una cadena privada como es la MTV que va por cable o satélite, que la programación basura que tenemos que ver en televisiones generalistas en horario de mañana y tarde. Y mientras hablamos de J. Jackson, B. Spears y tonterías varias, pues dejamos un poco de lado el temita “Bush” que ya empieza a aburrir, ¿no?
Estos días no puedo dejar de pensar en la magnífica película de Barry Levinson “La cortina de humo” en la que vemos como unos asesores de la presidencia estadounidense se inventan una guerra para distraer a los medios de un posible escándalo sexual con una becaria de la Casa Blanca.
¿No será que ahora nos hemos inventado un escándalo moral para distraernos de una guerra?