¿Y como demonios piensan encontrar a los compradores? ¿Cómo puede decirme un juez de lo que puedo hablar o no si he comprado legítimamente el libro? ¿Acaso no sabe ya también Alberto de Mónaco como acaba la historia?
Es que no lo puedo entender. Ni que se pusiera en juego la seguridad nacional…