Ha sido un año muy movidito en el ámbito televisivo. Empezando por el Comité de Sabios y la reforma del “ente” y siguiendo con la implantación de la televisión digital terrestre, pasando por la concesión de una canal analógico al Grupo Prisa y la creación de un Consejo Audiovisual que según Urbaneja, en la conferencia que dio en el Club Siglo XXI (disponible en PDF), tendría una “razonable” independencia del poder político de turno (tiene guasa la frase).
Pero por si esto fuera poco, para que el verano no decaiga tenemos la polémica suscitada por el programa de TVE.
Es decir a 69.446 € por programa. O sea que hacerlo con personal propio cuesta más de un millón de las antiguas pesetas, en contraposición a hacerlo con personal de la productora subcontratada.
Pero yo me pregunto si en esos cálculos del coste de la productora se han incluidos los sueldos del personal de TVE que se siguen pagando, hagan o no el programa.
Admito que soy de letras, puras. Sin embargo, sabiendo el dato de que TVE tiene un gasto en personal muy superior al de cualquier otra televisión privada, que con toda probabilidad se verá solucionado con prejubilaciones y restructuraciones de personal, mientras todo eso llega, ¿no sería mejor mantener al personal ocupado?