Eduardo Arcos de ALT1040 se está iniciando en el difícil camino de los podcast y parece que las reacciones han sido diversas.
Vaya por delante que visito ALT1040 desde hace tiempo y es uno de mis blogs fundamentales, sin duda alguna. Ahora bien, que Eduardo domine el lenguaje de un weblog no significa necesariamente que pueda dominar el lenguje audiovisual, concretamente el auditivo que se usa en los podscast.
Personalmente opté por la opción de comentarle en privado lo que me había parecido y, ante mi sorpresa, su respuesta no se produjo en privado sino en público, en su segundo podcast, así que por alusiones me veo en la necesidad de contestar también públicamente. Principalmente porque me he sentido molesta ante su afirmación de que quienes defendemos que la audiencia no puede sostener una atención continuada por más de 20 minutos es porque pensamos que la audiencia es tonta.
Aclaremos que esos no son datos que sospechamos, sino que está demostrado que la mente humana se distrae o pierde atención a partir de los 20 minutos. Es el motivo por el que rara vez vemos en tv que haya bloques de un único tema que duren más que unos pocos minutos. O el motivo por el que en las películas suele haber un “punto de inflexión” a los 20 minutos de comenzar la misma, y otro 20 minutos antes de que acabe (independientemente de otras variaciones).
Y eso Eduardo, no es porque menospreciemos a la audiencia, sino porque no queremos matarla de aburrimiento 😉
Yo fui una de las que le comenté a Eduardo que la duración de su podcast (o emisión de vaina como ahora lo llama) era excesiva en su duración, y da igual que fuera 40 minutos que 10 que 3 horas.
Su problema es de ritmo, y no me vale que incluya música, porque el hecho de que valore y aprecie sus conocimientos tecnológicos no quiere decir que comparta sus gustos musicales, y si quiero escuchar música prefiero SmoothJazz.com. Admito que he escuchado pocos podcasts y poco variados, pero es porque me aburren, porque el ritmo es muy lento y terminan dejando de interesarme.
Comenté en otro weblog, que el problema es que probablemente mucha gente piensa que basta con ponerse delante de un micrófono, con un guión o escaleta más o menos detallado, y ponerse a hablar. Lamentablemente no es tan sencillo, y en imprimir un buen ritmo y ameno a un discurso de 20, 30 o 40 minutos es bastante difícil de conseguir y requiere preparación y experiencia.
Ocurre lo mismo que con los cortometrajes. He visto cortometrajes de 5 minutos que se me han hecho eternos y otros de 20 que se me pasaban en un suspiro (y aclaro que he visto más de 1.500 cortometrajes, con lo que se aprende algo de ritmo narrativo).
Pero como ya se ha dicho, es un medio incipiente que evolucionará mucho y estoy convencida de que aún require de muchos ajustes.
Por último, como he visto que en algunos weblogs se ha reprochado el hecho de que quién ha criticado a algún podcaster no tenía podcast propio, diré que aparte de mi experiencia profesional en radio (hice mi primer programa de radio a los 13 años), siempre he pensado que no hace falta saber cocinar para saber si una tortilla está buena o no.
Actualización: 14:36 h.
Juanpi lo explica mejor y con mucho más detalle en: GarajeKubrick: Atención parcial continuada