Los más cercanos a mí sabéis que tengo un buen motivo para haber bajado mi regularidad en la publicación de entradas en este blog, que desde luego nada tiene que ver con la falta de temas ya que habría muchas cosas de las que me apetecería hablar en profundidad, y de hecho algún día no muy lejano las retomaré, pero de momento mis obligaciones están en otro lado.
No obstante dado que este polémica ya la he tratado varias veces en mi twitter, siento la necesidad de extenderme más allá de los 140 caracteres para dejar clara mi postura.
En primer lugar decir que Twitter es como el chiste del gato, que no reproduciré aquí, pero que en definitiva viene a decir que cada uno usa twitter como le apetece, faltaría más, pero eso implica a autores y lectores, y yo, como lectora estoy también en mi derecho de elegir a quién leo y a quién no, y no es en absoluto un tema personal o de amistad, sino de que me interesen sus posteos o no.
De hecho, cuando yo me he puesto a transmitir un partido de Wimbledon por twitter he perdido bastantes followers, y es normal. No están interesados en el tenis, y les saturo el timeline. Jamás se me ha ocurrido tomármelo como algo personal.
Así en los últimos tiempos yo he desfolloweado a algunos autores porque no me interesaban sus tweets y en algunos casos incluso me molestaban. Por ejemplo:
- Caso 1: El twitteador que sólo lo usa para poner enlaces de sus entradas. Aquí la palabra clave es “sólo”. Normalmente son autores cuyos blogs sigo regularmente a través de mi agregador, por lo que no necesito duplicar dicha información y sólo satura mi timeline. Es normal publicar tus propios enlaces, incluso yo lo hago de vez en cuando (de hecho lo haré con este post por razones obvias), pero no es ni mucho menos el principal uso que hago de twitter, y desde luego siempre intento que quede bien claro que es un link mío para que mis lectores decidan si pinchan o no.
- Caso 2: Idem al anterior pero con cebo. Éste es el que me molesta, el que mayoritariamente usa twitter para lanzar sus entradas pero además lo hace con una frase llamativa del tipo “Mirad que superguay chupilerendi es esto”. Y por ahí sí que no paso, porque me da la impresión de estar viendo los cebos del “Aquí hay tomate”.
Repito que cada uno hace con su twitter lo que quiere, pero como escritor y como lector, y por tanto yo como lectora quiero quedarme con aquellos twitteros que de verdad me aportan algo, que son muchos y muy buenos.
Pero de verdad no me gustaría que nadie se sintiera molesto por esto, y que entendiera que nuestro tiempo es limitado, y sólo intento no recibir información duplicada. Sé que muchos pensarán: “Pues tú eres muy pesada con los blipeos”, pues sí, culpa mía, lo sé… Siéntente libre de desfollowearme 🙂
No es personal, son sólo negocios 😉