Mucho se ha hablado en estos últimos tiempos de cómo la ficción televisiva ha incrementado su calidad considerablemente poniendo a nuestra disposición productos de una factura ncuestionable. Por citar algunos de ellos: El Ala Oeste de la Casa Blanca, Studio 60, Los Soprano, y algunos más actuales como Damages o In Treatment.
No todos han corrido la misma suerte y ni mucho menos han contado del favor del púbico, lo que ha llevado a la no renovación de temporadas, y en otros casos incluso a la suspensión casi en mitad de la temporada, como pasó por ejemplo con Dirty Sexy Money, que sin estar a la altura de las anteriores es un producto notable y muy entretenido y que nos retrotraía a las viejas soaps opera de lujo tipo Dallas o Dinastía, o también la estupenda Swingtown, de la que ya hablé, y que no ha conseguido renovar temporada.
Y seguro que se me quedan muchas atrás que todos conocéis, pero este post no iba sobre las buenas sino sobre las series malas. Sobre todo porque últimamente parecen acumularse en algunos canales temáticos españoles.
El otro día de hecho lo comentaba por twitter, ya que estaba viendo The Listener y de repente pensé: “Espero que “the listener” no haya renovado temporada porque no he visto peores actores en mi vida!”
Pero mi sorpresa fue ver un par de respuestas que me ponían sobre la pista de otras malas series que han coincidido en el tiempo. @Csogorb decía: “@sblanco hay que reconocer que es muy mala, pero si pasas a AXN puede ser peor (la plantacion)… y luego a la sexta (11th hour)”. Y @Roblaguna remató con otro bodrio de los grandes: “@sblanco agrega el refrito de “Knight Rider” a esa lista de malisimas series (y peores actores)”.
Así que eso me hizo pensar en todos esos bodrios en forma de serie televisiva que hemos visto en nuestra vida. A todos los mencionados anteriormente yo añadiría John Doe, en la que Dominic Purcell demostraba sus nulas cualidades como actor…
Pero como ya sabéis que tengo esta memoria de pez, había pensado que podías ayudarme a hacer un buen recopilatorio de esas espantosas series para las que también tenemos un huequito en nuestro corazón, y que incluso recordamos con algo de cariño.
¿Os animáis?