Hoy en día el uso de weblogs se ha generalizado y cualquier persona puede tener el suyo propio en esta biblioteca inmensa que es internet.
La diferencia está en que en las bibliotecas reales hay unos criterios determinados para seleccionar que volúmenes entrarán a formar parte de la colección. Mientras que en internet como ya hemos dicho, “cualquier” persona, “cualquier” idea encuentra su hueco y su modo de difusión indiscriminado.
Esto, evidentemente, es un arma de doble filo. Por un lado, culturas minoritarias, etnias desfavorecidas, etc, pueden encontrar su voz y su manera de ser escuchadas aún fuera del circuito mediático imperante en occidente, cuyo criterio de selección de noticias (agenda setting) está más condicionado por intereses empresariales que periodísticos.
Pero por otro, cualquier descerebrado puede difundir cualquier estupidez, y si no, no hay más que remitirse a las noticias falsas o “fakes” que con tanta frecuencia se distribuyen rápidamente por Internet con pocas posibilidades de que su corrección de difunda a la misma velocidad.
Y aquí estoy yo, periodista por vocación, que en ocasiones siento la egocéntrica necesidad de exponer públicamente mis reflexiones en distintos campos. Por eso surge este weblog, sobre todo como punto de partida para que nos cuestionemos todo la información que recibimos a diario de los medios de comunicación convencionales: prensa, radio, televisión y por qué no, la prensa electrónica también.
Espero que me ayudéis en la tarea y podamos debatir sobre éste y otros muchos temas.