Era demasiado bonito para ser cierto. Nos engañaron. Directamente: nos han mentido. Vasile dijo que se había “elaborado un catálogo de medidas para evitar la emisión de contenidos que puedan vulnerar los derechos de los menores, especialmente en el horario de protección infantil (de 6.00 a 22.00).”
Y todo eso ahora se queda en que “la cadena privada de televisión Tele 5 señaliza desde ayer con un símbolo su programación de tarde que considera no adecuada para menores de 13 años, lo que afecta a algunos de sus espacios más polémicos por sus contenidos como Aquí hay tomate, Gran Hermano y A tu lado”.
¿Esa es la gran autorregulación? ¿Esas son las 21 normas para controlar la telebasura? ¿Ese es el gran cambio en nuestra televisión? Yo no sé como no se les cae la cara de verguenza, sobre todo al tal Vasile que además suelta perlas como esta:
Muy bien, pues si no son son una cadena para niños, tienen dos opciones: o dejan de emitir en horario infantil, o emiten señal codificada. Y además les recuerdo que en Francia, el Consejo Superior del Audiovisual (CSA) tampoco puede cambiar los contenidos de un programa pero sí que puede decidir suspender la emisión en función de los contenidos.
Ya está bien de tomarnos el pelo. Esta es la mejor prueba de que la autorregulación no puede funcionar en un sistema de medios dominado por empresarios, y rara vez por profesionales de la comunicación.
Actualización 04/11/04: Algunos enlaces de este artículo han sido cambiados porque los anteriores han dejado de existir.