Al menos así lo publica hoy The Guardian que da datos de una investiación que confirma que aquellos fans que descargan “illegalmente” canciones de la red, también se han convertido en entusiastas compradores de singles y álbumes on line.
Al menos así lo publica hoy The Guardian que da datos de una investiación que confirma que aquellos fans que descargan “illegalmente” canciones de la red, también se han convertido en entusiastas compradores de singles y álbumes on line.