Cuando veo noticias como ésta me siento un poco más cerca de Fahrenheit 451
En la película de Truffaut, basada en la novela de mismo nombre de Bradbury, se plantea una sociedad en la que se han quemado todos los libros por ser subversivos.
Ya hemos empezado con el cine. Primero con Tom y Jerry, porque su público es mayoritariamente infantil, pero de ahí a borrar todas las películas con Humphrey Bogart o maravillas como Smoke (Wayne Wang, 1995) (por poner sólo un par de ejemplos), va un paso.
Tiempo al tiempo. Y por cierto, yo sigo sin fumar.
Gracias Luis Felipe