Almodóvar también en la lucha

‘La mala educación’ compite por un premio… (€)

Mientras Mar adentro hace las Américas, la otra gran película
española del año, La mala educación, hechiza al cine británico. La
película de Pedro Almodóvar opta al premio Orange, los máximos
galardones de la Academia del Cine Británico, a la mejor película
extranjera. La competición está liderada por El aviador, con 14
candidaturas y Vera Drake y Descubriendo Nunca Jamás, ambas
con 11.

Tendremos que esperar al 12 de febrero para saber qué tal le va al director Manchego.

5 comentarios en «Almodóvar también en la lucha»

  1. Hablando de películas y esperando que los trabajos de Amenábar y Almodóvar ganen sendos premios (no tanto por ser españolas sino por su calidad cinematográfica) me he topado con esta página que no sé si sea de utilidad para los amantes/conocedores del cine.
    Me imagino que muchos ya la conocerán pero otros quizás no. Yo por lo pronto la comparto con ustedes en espera que sea de utilidad: http://cin-o-matic.com/

  2. Sólo quiero decir que podría escribir un libro explicando por qué las películas de Almodóvar son tan “malas”, pero bueno, no es éste el lugar ni hay espacio suficiente
    A Almodóvar, como a cualquiera, le deseo lo mejor.
    Una de las grandes virtudes de Amodóvar es lo bien que “se vende” y lo bien que lo venden sus amigos en España. Desde luego, el éxito de Almodóvar fuera de España se exagera mucho aquí, es mucho más un éxito de la crítica más “intelectualoide” que de público.
    Es interesante el contraste con Amenábar, a quien, en mi opinión, no se le hace suficiente justicia en España. Y todas sus películas son, simplemente, magníficas. Amenábar fue portada de la revista “Newsweek” (una de las de mayor tirada y lectura del mundo) las pasadas navidades, y se le definía como “the new wunderkind” (“wunderkind”, niño prodigio en alemán) y se le comparaba implícitamente con Spielberg. Pero en España, parece que como no hace películas “étnicas”, como Almodóvar, o “raras”, como Almodóvar, es un director más..

  3. Desde luego, el éxito de Almodóvar fuera de España se exagera mucho aquí, es mucho más un éxito de la crítica más “intelectualoide” que de público.
    Pues resulta que la recaudación de La Mala Educación en Estados Unidos es bastante aceptable para una película venida de fuera, y Mar Adentro no ha recaudado prácticamente nada. Por otro lado “Los Otros” si que recaudó dinero. Pero ni a Almodovar solo le siguen los críticos, ni a Amenabar las masas enfervorecidas. Creo que no es cosa de autores, sino de películas.
    Es interesante el contraste con Amenábar, a quien, en mi opinión, no se le hace suficiente justicia en España. Y todas sus películas son, simplemente, magníficas.
    Amenabar lleva un año siendo portada de la mayor parte de prensa especializada y no especializada. Su película está nominada a 11 Goyas, su primera película fue nominada a siete y gano, entre otros el de mejor dirección novel y mejor película. Su segunda película (bastante peor, a mi juicio) también tuvo bastantes nominaciones. Su tercera película “Los Otros” Volvió a ganar (a pesar de las trampas de su guión) la mejor película y otro montón de Goyas, etc, etc.
    Almodovar está considerado a nivel de crítica y público. No tanto a nivel de industría. Pero vuelvo a mismo, lo importante son las películas concretas.
    Pero en España, parece que como no hace películas “étnicas”, como Almodóvar, o “raras”, como Almodóvar, es un director más..
    Parece que el problema es que, simplemente, Almodovar no te gusta, pero sus películas no son “raras”. Eso no existe. ¿las películas de Amenabar sobre fantasmas, obsesiones sobre la muerte en varios formatos, snuff movies, criogenización y eutanasia no son raras entonces? Cualquier director y guionista con un poco de personalidad podría hacer películas “raras”.
    Las comparaciones son odiosas y un tanto ridículas y el rollo “amenabar” “almodovar” es un inventillo mediático que no tiene demasiado interés. ¿no?

  4. Hola Guillermo,
    mis comentarios se basaban en mi sensación personal sobre lo que pasa en la calle en España. No estaba al corriente de los taquillajes de Almodóvar y Amenábar. Tampoco sabía lo de las publicaciones españolas.
    Cuando digo que Almodóvar hace películas “raras” lo que quiero decir es que tanto sus personajes como sus narrativas se alejan de los cánones de construcción clásicos del cine de Hollywood (ver libro de Bordwell: Classical Hollywood Cinema: Narrational Procedures, que creo que está publicado en España). y no me refiero sólo a los temas que trata, sino a la técnica narrativa y al desarrollo de la definición de los personajes. Desde ese punto de vista, las película “The Others” es mucho más “clásica”, más “Hollywood” (menos “rara”, en mi propia terminología de andar por casa) que las de Almodóvar.

  5. El famoso director, aparte de obsequiarnos con otro bodrio (lo siento pero es mi opinión) se ha enfadado porque no le han dado los premios que él esperaba en el último certamen de los Goya. Ha dado un golpe de efecto (o de estado) criticando el sistema de puntuación que no le ha favorecido en esta ocasión. Porque, como algún director colega ha dicho, quizás tenga razón, pero debió haber dado ese paso después de conseguir 7 estatuillas con ‘Todo sobre mi madre’ (otro bodrio). El flaco favor que le hace al cine español desacreditando a la academia huele un poco a rabieta. ¡Que poco democrático es acatar las normas dependiendo de los resultados! Si a esto añadimos el boom de ‘Mar adentro’ y su presentación por parte de la academia como candidata a los Oscar, queda todo bastante claro. Porque el Pedro que aquí ejerce de anti-yankee se deslumbra con los halagos y el glamour de Hollywood exhibiendo un respeto y moderación desconocidas por estas latitudes. Yo, sinceramente, me quedo con su primera etapa (y no toda). Desde ‘Carne trémula’ he perdido el interés por su obra. Quizás ese cine tan personal y de autor se olvida un poco del señor que se sienta a visionarlo. Como curiosidad está bien pero cuando deja de sorprender y utiliza temas tan recurrentes como poco cotidianos, empacha un poco y aburre un mucho. Ahora, eso sí, respeto a la minoría que disfruta con su cine pero también propongo que se den oportunidades a las jóvenes promesas que no reciben las subvenciones que disfruta él y que pretenden hacer un cine nuevo con el espectador como punto de referencia y con la calidad que este exige.

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