Definitivamente me siento abrumada por la cantidad de correo electrónico que recibo cada día. Afortunadamente la mayoría sin Spam, y también una mayoría que no requiere respuesta, aunque sí una detenida lectura.
Aún así, la cantidad de correos que requieren respuesta sigue siendo muy elevada y eso hace que a veces me retrase días (incluso semanas) en contestarlos. Pero no siempre es culpa del receptor, ya que en muchas ocasiones el emisor podría ponérselo mucho más fácil al destinatario y así conseguir una respuesta rápida.
Es por eso, que tras una conversación de hace unos días sobre si leía todos mis correos o no, he pensado en hacer esta pequeña guía de optimización del email como herramienta personal y/o profesional.
El primer mandamiento del email que nadie nunca debería olvidar es:
O lo que es lo mismo: cuanto más largo es tu correo, menos posibilidades tienes de que sea leído y además contestado. Por la sencilla razón de que un correo largo suele acarrear una respuesta larga.
Y es que alguna gente debe tener mucho tiempo libre para escribir correos tan largos, pero no siempre tienen en cuenta que el receptor no tiene tiempo para atenderlos debidamente. Así pues, si quieres aumentar tus posibilidades de lectura y respuesta ten en cuenta los siguientes sencillos consejos:
- Se breve y conciso: Ve al grano pero sin dejar atrás información que ayude al receptor a atender tu petición o entender tu problema. Porque si preguntas algo como “¿Quienes son los guionistas de “Mujeres Desesperadas”?”, lo normal es que se te responda algo del tipo “Busca en Google”
- Plantea preguntas de respuesta breve: Si el destinatario solo tiene que responder con “SI” o “NO” (en vez de explicarte con pelos y señales un proceso), aumentan tus posibilidades de una respuesta rápida.
Y como tampoco quiero que esto se convierta en un post de esos tan largos que tampoco se lee nadie, lo voy a dejar aquí, aunque estoy dispuesta a añadir vuestras sugerencias al respecto.
Muchas gracias por escribirme, que me encanta, y espero poder seguir contestando a todos.
Sólo pedirte que no pongas más gifs animados en los posts.
Dificultan su lectura con los agregadores de noticias. Al menos, con el que yo uso, el Google Reader.
Gracias mil.
Solucionado Franjo, gracia por el aviso y perdona por las molestias 🙂
Es una idea excelente. Yo añadiría:
– No envíes ficheros adjuntos que hayas encontrado en internet, envía sólo la url.
– No adjuntes documentos en word, si es poco texto, escribe directamente en el mensaje.
Bueno todo depende de quien remita los mails. Si nos interesa o lo estamos esperando agradecemos e-mails largos. Sino… pues la cosa cambia.
Pienso que para los usuarios de gmail es muy util usar lo de micuenta+perfil1@gmail.com para filtrar spam al dejar esa cuenta en según que sitios. 🙂
Mmm, ah, yo también prefiero mails cortitos pero los contesto todos, excepto los de spam, claro. 😉
Aguante gif animado !!
No, en serio; la verdad es que no estoy muy de acuerdo con la guía suya y paso a denotar mis porqueses.
Siempre me ha gustado pensar que el correo electrónico se concebiría como un “sustituto” de la carta tradicional; esto es, su saludo, su cuerpo más o menos extenso, y su despedida y cierre. Me saben a poco, por no decir mal, aquéllos que lo tratan como un pariente del SMS: corto, soso y deslavazado.
Eso, en lo personal.
Pienso lo contrario cuando, por ejemplo, se trata de algo profesional. El ejemplo más claro que me viene a la cabeza es en las listas de correo, donde los tochos sí que dificultan lo interesante (sobre todo para quien se suscribe vía digest) y para qué mencionar ya a los que debajo de su mensaje dejan citado todo el hilo anterior.
PD: El Google Reader… como se nota que no usa Opera !! 😉
Me parece un planteamiento más que razonable que propongo hacer extensible a los artículos de los blogs. Tengo que confesar que mi innata pereza me hace desistir de un post que sobrepasa las diez líneas, incluso si estoy enganchada. ¿Por qué? supongo que la lectura en pantalla satura bastante y las horas que paso delante del pc son demasiadas. Por otro lado odio caer poco a poco en la cultura speed que nos somete cada día más en los últimos años. Prisa prisa prisa porque hay muchas cosas que hacer y poco tiempo. Siempre pensando en el “después”. Ayyyy!
definitivamente, yo siempre me salto las líneas